lunes, 15 de diciembre de 2014

"Lo que el viento se llevó": 75 años

Hoy se cumplen 75 años del estreno mundial de Lo que el viento se llevó en Atlanta, Georgia.
Un artículo le dedica un homenaje a través de citar varios detalles:

*El vestido “de las cortinas”: La Universidad de Texas-Austin Harry Ransom Center muestra 3 vestidos originales por primera vez en 25 años. Pero el que verdaderamente llama la atención del espectador es el vestido verde realizado con las cortinas de Tara.

El modelo ha requerido 10.000 dólares para su conservación hasta ahora, incluyendo nuevas prendas interiores para crear la original forma que vemos en pantalla. Los resultados merecían la inversión, según relata el responsable de la exhibición Steve Wilson: “Es sorprendente. Da la impresión que un vestido ordinario no tiene. Se consigue una real sensación de estar al lado de Escarlata O’Hara o Vivien Leigh cuando estás cerca de esos vestidos, y la gente señala que era muy delgada.

*Olivia de Havilland sigue siendo vivaz y activa a sus 98 años, y se muestra orgullosa de la película, como si formara parte de su legado. La actriz comentó que tuvo grandes esperanzas para la película: que se proyectaría con éxito durante cinco o seis años antes de desaparecer de la pantalla.

*Tara: La fachada de la plantación creada en Georgia se conservó en el estudio de la MGM antes de su mudanza a la zona de Atlanta, donde languideció durante años (a excepción de la puerta, que fue restaurada y colocada en el Museo Margaret Mitchell). El historiador local y guía Peter Bonner considera que su misión es restaurar la fachada, ahora guardada en una granja lechera.

*El retrato de Escarlata. Una pieza central del Museo Margaret Mitchell es el retrato de O’Hara que vemos en la película, todavía mostrando las cicatrices del vaso de jerez que le lanzó el frustrado Rhett Butler.

La propiedad fue enviada a Atlanta para el estreno y se mostró en un departamento de una importante empresa, antes de moverse a la Escuela Elemental Margaret Mitchell, que a su vez lo prestó a la Casa de la autora desde 2004.

*”Frankly, my dear”: El American Film Institute reunió las 100 líneas más importantes de la historia cinematográfica hasta 2005. En la cabeza de la lista estaba la frase de Rhett Butler.

Selznick tuvo que luchar con los censores de la época para mantener la apreciada línea, acusada de profanidad por el comité censor. El productor consideró otras variaciones, como “Frankly, my dear, I just don’t care”, que fue filmada en secreto como un apoyo. Los memos de la época reflejan también otras versiones, pero ninguna de esas frases se acercaba al impacto necesario.

*Supermarca de taquilla: Titanic, Avatar y La Guerra de las Galaxias inclinan sus respectivas cabezas ante el aluvión de Gone With the Wind. Cuando los precios de taquilla son ajustados por la inflación, la película mantiene la cifra de 1.6 billones de dólares de recepción doméstica, que la coloca a la cabeza.

*Escarlata O’Hara: La película invitaba a disfrutar de dos de las mayores estrellas de la época. Clark Gable y Leslie Howard. Pero fue la recién llegada actriz britànica Vivien Leigh quien se hizo con el mando, después de una búsqueda que incluyó a estrellas de Hollywood, como Bette Davis o Katharine Hepburn... Leigh deslumbra en un papel que aparece en casi todas las secuencias. Apunta Osborne que tan maravilloso como es la película, con todas las magníficas intepretaciones, sin Vivien leigh en la primera posición el film no tiene el impacto o perdurabilidad necesarios. Es la perfecta para intepretar a Escarlata O’Hara; Vivien Leigh le da al papel y a la película su inmortalidad. El moderno y cabezón papel estaba también por delante de la mentalidad de la Guerra Civil o 1930. La actitud de Escarlata sobre el papel de la mujer en el mundo era muy diferente y mucho más relevante hoy.

*Vestido de la Luna de Miel: El vestido de seda de bengalina que lleva Escarlata es el único que se muestra de forma permanente en el Museo Gone With the Wind de Marietta, en Georgia.

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